Íbamos contentísimos. ¡La primera vez! La noche estaba fresca y bastante oscura. Pero, utilizando la linterna, cruzamos las zanjas siguiendo un camino que nos era bien conocido, hasta llegar a unos albardones, en el fondo. Yo iba adelante y mi hermano me seguía. De pronto, en tanto nos deteníamos para escuchar, alertas a cualquier ruido.
La entrada Cuento de Liborio Justo: Una cacería aparece primero en Narrativa Breve.